Loma Linda, California: una comunidad que vivie una media de 10 años más que el resto de estadounidenses
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La Iglesia Adventista del Séptimo Día en esta soleada zona del sur de California fue fundada en la década de 1840. La iglesia floreció a lo largo del siglo XX, al igual que sus miembros, que consideran la salud como un fundamental de su fe.
A día de hoy sonuna comunidad de unos 9.000 adventistas en el área de Loma Linda es el núcleo de la región de la zona azul de Estados Unidos. Viven hasta una década más que el resto de nosotros y gran parte de su longevidad puede atribuirse al vegetarianismo y al ejercicio regular. Además, los adventistas no fuman ni beben alcohol.
Encuentra un santuario a tiempo
Un descanso semanal de los rigores de la vida diaria, el sábado de 24 horas ofrece un tiempo para concentrarse en la familia, Dios, la camaradería y la naturaleza. Los adventistas afirman que esto alivia el estrés, fortalece las redes sociales y proporciona ejercicio constante.
Mantener un índice de masa corporal (IMC) saludable
Los adventistas con un IMC saludable (lo que significa que tienen un peso adecuado para su estatura) que se mantienen activos y comen carne con moderación, si es que comen carne, tienen una presión arterial más baja, un colesterol sanguíneo más bajo y menos enfermedades cardiovasculares que los estadounidenses más obesos con un IMC más alto.
Haga ejercicio moderado y regular
La Encuesta Adventista de Salud (AHS) muestra que no es necesario ser maratonista para maximizar su esperanza de vida. Hacer ejercicio regular y de baja intensidad, como caminatas diarias, parece ayudar a reducir las posibilidades de sufrir enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.
Pase tiempo con amigos
Los adventistas tienden a pasar tiempo con muchos otros adventistas. Encuentran bienestar compartiendo sus valores y apoyando los hábitos de los demás.
Coma nueces como aperitivo
Los adventistas que consumen frutos secos al menos cinco veces por semana tienen aproximadamente la mitad de riesgo de sufrir enfermedades cardíacas y viven unos dos años más que aquellos que no lo hacen. Al menos cuatro estudios importantes han confirmado que comer frutos secos tiene un impacto en la salud y la esperanza de vida.
Devolver algo
Como muchas religiones, la Iglesia Adventista del Séptimo Día alienta y brinda oportunidades para que sus miembros se ofrezcan como voluntarios. Personas como la centenaria Marge Jetton se mantienen activas, encuentran un sentido de propósito y evitan la depresión concentrándose en ayudar a los demás.
Coma carne con moderación
Muchos adventistas siguen una dieta vegetariana. La AHS muestra que el consumo de frutas, verduras y cereales integrales parece proteger contra una amplia variedad de cánceres. Para aquellos que prefieren comer algo de carne, los adventistas recomiendan servir porciones pequeñas como guarnición en lugar de como comida principal.
Coma una cena ligera y temprana.
“ Desayuna como un rey , almuerza como un príncipe y cena como un pobre”, se dice que recomendó la nutricionista estadounidense Adelle Davis, actitud que también se refleja en las prácticas adventistas. Una cena ligera temprano en la noche evita inundar el cuerpo con calorías durante las partes inactivas del día. Parece promover un mejor sueño y un IMC más bajo.
Pon más plantas en tu dieta.
En apoyo de una dieta bíblica de cereales, frutas, nueces y verduras, los adventistas citan Génesis 1:29: “Y dijo Dios: He aquí, os he dado toda hierba que da semilla, que está sobre la faz de toda la tierra, y todo árbol en el que haya fruto de árbol que dé semilla; A vosotros os servirá para comer. Los adventistas alientan una “dieta bien equilibrada” que incluya frutos secos, frutas y legumbres, baja en azúcar, sal y cereales refinados. Los estudios han demostrado que los adventistas no fumadores que comían 2 o más porciones de fruta al día tenían aproximadamente un 70% menos de cáncer de pulmón que los no fumadores que comían fruta una o dos veces por semana. Los adventistas que comieron legumbres como guisantes y frijoles 3 veces por semana tuvieron una reducción del 30 al 40 por ciento en el cáncer de colon.